La tecnología no es buena ni mala, sí pueden serlo las intenciones para las cuales se utiliza. Es una realidad: las nuevas tecnologías son aprovechadas por el cibercrimen para sofisticar sus ataques. Pero también, la Inteligencia Artificial resuelve diversas cuestiones cotidianas y hasta sorprende con sus alcances y posibilidades: el campo de la salud puede dar cuenta de ello. Es por eso que repasaremos cómo la IA impactó positivamente en este área tan importante, facilitando la detección temprana de enfermedades y el seguimiento de diversos tratamientos.
Detección del cáncer de piel al alcance de la mano
Un smartphone. Solo eso se necesita para detectar el cáncer de piel gracias a los avances que lograron investigadores del MIT y otras organizaciones vinculadas al desarrollo tecnológico en el campo de la salud. Nos referimos a una aplicación que analiza las lesiones pigmentadas sospechosas de la piel del paciente a través de fotos de amplio campo, y según la apariencia de cada una sugiere una especial atención o la derivación a un dermatólogo.
Esto se traduce claramente en una posible detección más temprana del melanoma, lo cual permite actuar de una manera más rápida y evitar así que continúe avanzando. Y además, representa una muy buena noticia, sobre todo si se tiene en cuenta que el melanoma es responsable de más del 70% de las muertes relacionadas con el cáncer de piel en el mundo.
Técnicamente, la app se vale de redes neuronales convolucionales profundas y las aplica al análisis de las lesiones pigmentadas sospechosas a través del uso de la fotografía de campo amplio común, disponible en la mayoría de los teléfonos inteligentes y cámaras personales.
¿Cómo funciona? Un sistema automatizado detecta, extrae y analiza las lesiones cutáneas pigmentadas, y la red neuronal convolucional profunda (previamente entrenada) evalúa cada lesión. Si la marca en amarillo es necesaria una inspección adicional, y si la marca en rojo, se requiere una inspección adicional y/o derivación a un dermatólogo. La precisión alcanzada por este sistema en la detección de melanoma a partir de fotos de smartphones es del 90,3%.
Detección de la enfermedad de Parkinson a través de la risa
Por más que parezca, esto no es un chiste: se puede detectar de manera temprana el mal de Parkinson a través del análisis de la risa. En ello han estado trabajando investigadores españoles de diversas instituciones de Madrid y Zaragoza, en conjunto con expertos en tecnologías de voz e inteligencia artificial. Y los resultados han sido por demás satisfactorios.
En el artículo publicado en el sitio de la International Journal of Environmental Research and Public Health, los investigadores demostraron que gracias a un sistema automático de apoyo a la decisión es posible reconocer pacientes que sufren Parkinson analizando sus risas. Valiéndose de una base de datos de 20.000 muestras generadas a partir de personas sanas y de pacientes con Parkinson, alcanzó una prometedora tasa de acierto del 83%.
Según la palabra de los investigadores, gracias a este tipo de tecnología aplicada a la detección precoz del Parkinson se podrá mejorar la eficiencia del tratamiento terapéutico, la calidad de vida de los pacientes, a la vez que se optimizarán los recursos en los sistemas de salud, tanto públicos como privados. De cara al futuro, se espera que el análisis pueda realizarse a través de una aplicación desde el teléfono, con un resultado fiable y en pocos minutos.
Diagnóstico de ataques cardíacos gracias a un algoritmo
CoDE-ACS: así se llama el algoritmo desarrollado por investigadores de la Universidad de Edimburgo que permite diagnosticar de manera rápida y precisa un ataque cardíaco. De hecho, la sigla es la versión corta de su nombre completo, Colaboración para el Diagnóstico y Evaluación del Síndrome Coronario Agudo y si bien aún se trata de un prototipo, ya se está utilizando en Escocia para ver si se reduce la saturación en los departamentos de emergencia.
Basado en datos recopilados de más de 10.000 pacientes que presentaron posibles ataques cardíacos, este algoritmo se diferencia de otros métodos más tradicionales (los cuales solo se centran en medir los niveles de la proteína troponina en la sangre), y utiliza un enfoque más amplio, integrando variables como la edad, el sexo, hallazgos en el electrocardiograma y el historial médico, sumando por supuesto a los niveles de troponina.
A partir de esa información, calcula la probabilidad de que se haya producido un ataque cardíaco, y gracias a su precisión del 99.6%, optimiza la atención en las salas de emergencias.
Detección de tuberculosis, con IA y radiografías
¿Qué es IARA? Una página web que se vale de inteligencia artificial para detectar de manera temprana casos de tuberculosis en radiografías torácicas, y cuyo nombre completo sintetiza su objetivo: Inteligencia Artificial aplicada en radiografías. ¿Las personas detrás de este proyecto? Un grupo de estudiantes de quinto año en la Escuela ORT de Belgrano, ubicada en la Argentina, que contaron con la colaboración del Hospital Muñiz y la Universidad Maimónides.
El impacto de esta nueva herramienta sirve para atacar una problemática tan actual como preocupante: si bien la tuberculosis es prevenible y curable, la falta de recursos tecnológicos para diagnosticarla en 2022 se cobró la vida de 1.3 millones de personas en todo el mundo.
Al igual que en cualquier tipo de Inteligencia Artificial, IARA fue entrenada con datos, o mejor dicho, con radiografías catalogadas como “tuberculosis” o “no tuberculosis”. Gracias a los patrones que generó, al mostrarle una radiografía devuelve un porcentaje de probabilidad de que la imagen en cuestión sea positiva para la enfermedad.
Enfermedades de salud mental y el acompañamiento de ChatGPT
Las enfermedades de salud mental se dispararon abruptamente en la pandemia ocasionada por el Covid-19: de hecho, la Organización Mundial de la Salud informó que solo en el primer año de este sucesoque afectó a todo el mundo, se incrementó en un 25% la cantidad de pacientes con depresión y/o ansiedad.
Para dar seguimiento y apoyo a las personas que sufren este tipo de trastornos es que Rob Morris se propuso crear Koko, una herramienta de apoyo que acompaña psicológicamente y emocionalmente a las personas que necesiten cuidar su salud. Para ello, es necesario ingresar a su plataforma y tener internet, para así comenzar a interactuar con la inteligencia artificial, que además cuenta con la supervisión de un equipo de profesionales. Entre las opciones que ofrece el menú de Koko se encuentran: apoyo mutuo, cursos de autoayuda, plan de seguridad o la chance de conectarse con líneas de crisis alrededor del mundo (hay para Latinoamérica).
De elegir la opción de “Apoyo mutuo”, la persona recibirá mensajes por parte de la comunidad de Koko y podrá responderlos y hasta calificarlos. Estos mensajes no son enviados a ChatGPT directamente, sino que son moderados por un equipo de profesionales. Actualmente, es posible contactar a través de Koko por WhatsApp, Telegram y Discord.
Estos son solo algunos casos en los cuales la Inteligencia Artificial cumple un rol fundamental en la detección temprana y seguimiento de diversas enfermedades. Así, se confirma que las nuevas tecnologías pueden tener un uso saludable y decisivo para todas las personas, más allá de las acciones malintencionadas del cibercrimen. Como siempre, el progreso puede disfrutarse si está en buenas manos.